Goya forever

 

31 de enero de 2022, por Lunettes Rouges

(artículo original en francés, aquí)

Lamento no haber visto la exposición Goya en la Fundación Beyeler que acaba de terminarse. Pero para la ocasión Cahiers d'Art publicó un bonito libro con estuche, intitulado « Ever Goya » que de cierta forma presenta la filiación de Goya. Por un lado, un estudio histórico de la historiadora de arte especialista del pintor, Manuela B. Mena Marqués, sobre la influencia de Goya en los artistas. Empezando por Malraux («Luego comienza la pintura moderna»), analiza la forma en que Delacroix, Manet, Baudelaire, Ensor, se inspiraron de las brujas y de los caprichos; luego trabaja sobre el estilo a la Goya de Manet o de Munch. Sobre el tema de la guerra vincula el Guernica de Picasso, Otto Dix o Bacon con el pintor español; a propósito de la tauromaquia, Picasso, Bacon y Toulouse Lautrec. Y con otros más contemporáneos Schnabel, Polke o Saura. Es un muy buen estudio, erudito y amplio aunque nos hubiera gustado que profundizara más sobre algunos artistas. Para completar hay un texto de Donatien Grau sobre la recepción de Goya en el siglo XIX: la importancia del negro, el fantasma, la oscuridad y ante todo un bonito análisis sobre Redon y Goya. Para terminar un hermoso texto que data de 1937 del escritor José Bergamin quien en plena guerra civil insiste sobre la hispanidad de Goya, de sus caprichos, desastres y despropósitos. 

Cristina Iglesias, The Shore and the Ocean, 2020, técnica mixta sobre papel, 31x40cm

La otra parte del libro es la presentación de 45 artistas contemporáneos más o menos conocidos que Goya inspiró. Están clasificados por orden alfabético tanto en la introducción como en el cuerpo del libro, pero podemos intentar agruparlos en función del modo de inspiración. Tenemos a aquellos que dibujan más o menos con el mismo estilo, por ejemplo Etal Adnan, Michael Armitage y ante todo Raymond Petitbon (con otra ortografía Pettibon...). Tenemos a aquellos a quienes Goya inspira más bien un trabajo histórico y político: Fancis Alÿs, Jenny Holzer (únicamente texto), Robert Longo, Luc Tuymans. Otros que insisten más sobre el estilo, el aspecto formal de su pintura: Anne Imhof, Jennifer Packer, Thomas Schütte. Los que hablan de Goya, Marlène Dumas (sólo texto), Cildo Meireles, y comparten su perspectiva sobre su obra, Philippe Parreno y especialmente Alfredo Jaar (quien profundiza en No se puede mirar). 

Alfredo Jaar, Francisco de Goya, No se puede mirar, serie «Desastres de la guerra», 1810-1815, agua fuerte, aguada marrón, punta seca y buril, 24.9×34.2cm, p. 126-127

Pero los que más interesantes me parecen son los que reinterpretan la obra de Goya y realizan variaciones. Fernando Arrabal (que también hizo el texto más bonito) introduce en los cuadros elementos que perturban, por ejemplo una serpiente insinuando su lengua hacia el pubis de la Maja Desnuda. Miguel Barceló dibuja retratos de Goya y escenas de tauromaquia. Cristina Iglesias pinta paisajes marinos inspirados en el Naufragio. Rachel Rose imagina paisajes en los que tal escena de Goya pudo tener lugar. Otros me parecieron menos convincentes: Beatriz González y su retrato presidencial, Koo Jeong A y sus dibujos de árboles, la película de Alexander Kluge, los caligramas de Precious Okoyomon, los collages foto de Elena Rivero, la crítica institucional de Santiago Serra, el relato de Rose Marie Trockel o la niñería de Adrián Villar Rojas. Un ensayo de  Manthia Diawara y Terri Geis se esfuerza por vincular artistas afro-americanos (por ejemplo Michael Armitage y Precious Okoyomon) con Goya y Edouard Glissant, es el menos convincente de los ensayos. Para terminar, nos extraña la ausencia de los hermanos Chapman que son sin duda los artistas contemporáneos más cercanos a Goya: ver la exposición sobre los Caprichos en Lille en 2008. Un detalle: hubiera sido interesante tener reseñas sobre los artistas, todo el mundo no conoce Precious Okoyomon... Libro recibido en servicio de prensa.