mardi 5 décembre 2023

El Tiempo y el Amor, el Tiempo y la Mentira

 


22 de noviembre de 2022, por Lunettes Rouges

(artículo original en francés, aquí)


Pierre Mignard, El Tiempo le corta las alas al Amor, 1694, óleo sobre lienzo, 62 x 47,2 cm, col. Guy y Héléna Motais de Narbonne.


La exposición Allegoria, en las antiguas caballerizas (difíciles de encontrar) en el Parque de Sceaux (hasta el 14 de enero) presenta argumentos ricos y documentados sobre la alegoría en Francia en el siglo XVII. Esta vez los carteles explicativos son claros, tanto para un historiador del arte como para un simple curioso, por lo que podemos agradecerle al comisario Dominique Brême. Aquí debajo tenemos un ejemplo excelente, una presentación alegórica del universo del grabador Jean Théodore de Bry, «Espejo de la naturaleza entera e imagen del arte», que ilustra el libro publicado en 1617 Historia metafísica física y técnica del uno y el otro mundo, es decir del grande y del pequeño, de Robert Fludd (el hombre del primer monocromo negro): sin entrar en detalles (que pueden leer aquí, páginas 8 y 9), han ordenado, lo mineral, vegetal, animal, humano, los planetas, las estrellas y las esferas celestes; mientras uno más se eleva más liviano se siente, despojado de la materia vil. Vemos que la agudeza de la exposición consiste en combinar conceptos e imágenes: una parte importante presenta los libros fundadores de la iconografía de las alegorías, para empezar Iconologia de Cesare Ripa (1593) que fue una referencia para todos los pintores clásicos, aunque se hayan tomado muchas libertades con sus recomendaciones. 


Jean Théodore de Bry, Integrae Naturae Speculum Artisque Imago, en Robert Fludd, Utriusque Cosmi Majoris scilicet et Minoris Metaphysica, Physica atque Technica Historia, Oppenheim, 1617.


Es verdad que solamente hay 25 lienzos (además de muchos libros, objetos, reproducciones de obras del Louvre o de otras partes -por ejemplo de las seis de Las Artes Liberales de la Hyre, solamente presentan La Astronomía- y algunos grabados y dibujos): no hay ninguna obra maestra imperdible, pero hay obras de Philippe de Champaigne y de su sobrino, de La Hyre, de Le Brun y otros menos conocidos. Son lienzos que ilustran perfectamente el tema de la exposición. Una de las alegorías que más me atrae es, la de arriba, pintada por Pierre Mignard: el Tiempo, un viejo alado, canoso, barbudo y siniestro, con guadaña y reloj de arena, contiene, digamos que de cierta manera, castra, a otra alegoría corriente, la del Amor, que en vano protesta. El Tiempo triunfa sobre todo, el Amor, también la Belleza, la Gloria y la Mentira (ver el Botti de abajo); los sentimientos se atenúan y el desorden amoroso se desdibuja (¿qué hacer cuando Venus misma ayudada por Minerva la juiciosa, le corta las alas al desamparado Cupido para que sea menos inconstante?).


Simon Renard de Saint-André, Vánitas, hacia 1660, óleo sobre lienzo, 50,5 x 60,4 cm, col. Guy et Héléna Motais de Narbonne.


Descubrimos el sentido de numerosos símbolos, la pirámide, el huevo, las flores y las frutas (granada=unidad, higo=sexo, manzana=amor prohibido, durazno=verdad), la metáfora de la mariposa (el gusano es la vida humana, la crisálida la tumba, la mariposa la resurrección). La naturaleza muerta de Simon Renard de Saint André, es una vanidad que toma todos los símbolos del género (que no aparece como alegoría moral sino a principios del siglo XVII): vemos objetos que simbolizan los bienes materiales y los placeres de este bajo mundo (instrumentos de música, partituras, telas preciosas), objetos que recuerdan la moral y la necesidad de meditar sobre el sentido de la vida (libro religiosos con escenas de la Resurrección de los muertos y el Juicio final, conchas vacías y la serpiente símbolo del mal), otras que evocan la fuga del tiempo y la muerte ineluctable (además de la calavera volcada, el reloj de arena, la vela que se apaga), y para terminar la mariposa, promesa de la vida después de la muerte. 


Francesco Botti, El Tiempo le arranca le arranca la máscara a la Mentira, hacia 1680-1690, óleo sobre lienzo, 76 x 94 cm, coll. Guy et Héléna Motais de Narbonne; foto del autor


Más de la mitad de las obras proceden de colecciones particulares, ésta (y también). La gran mayoría son lienzos de artistas franceses; única excepción, un anónimo flamenco sobre los cinco sentidos y El Tiempo arrancando la máscara a la Mentira del florentino Francesco Botti, es un bonito cuadro a la Caravaggio en el que la Mentira no solamente va enmascarada sino que es también una mujer travestida... La última sección, igual de importante históricamente es menos estimulante desde el punto de vista iconográfico: cómo las alegorías sirvieron en la educación de los príncipes y más generalmente para exaltar las virtudes del poder. Es una bonita exposición bastante instructiva que se puede completar con la visita del Pabellón de la Aurora en el Parque de Sceaux. Es una lástima que no haya catálogo, especialmente porque el único libro disponible en la pequeña librería habla precisamente de la última sección. 






Aucun commentaire:

Enregistrer un commentaire